ANTES DEL NAUFRAGIO

A veces las cosas no salen como esperamos. El sábado 26 de setiembre pasado tuvimos oportunidad de presenciar el culto que la mediocridad le rindió al fracaso. En Parque Lezama de la CABA, se llevó a cabo la comedia más ridícula de LLA (La libertad Avanza).

Ya nos tenía acostumbrados el Emperador Javo a las más desopilantes y absurdas expresiones que generalmente coronan sus estrafalarias actitudes, pero la fantochada que hicieron junto con su hermana (El Jefe) supera cualquier vodevil. Criticaban a los “Kukas” que según decían tenían reuniones multitudinarias porque los subían a los colectivos y les pagaban por venir, pero ellos trajeron algunos colectivos con personas a las que les pagaban $ 5000 + una bebida energizante y un pebete de jamón y queso.

¿Habrán pensado que iban a conseguir un resultado similar a las concentraciones kirchneristas?… pero con todo y mucho viento a favor, no llegaron a llenar la plaza y siendo generosos, podemos atribuirle 5.000 personas, teniendo en cuenta que los colectivos seguramente le habrán hecho un descuento porque pertenecían a la empresa familiar, sin pensar que tanto el refrigerio como el traslado fue pagado con la tuya y la mía, porque: “no-hay-plata”.

Pudimos presenciar el más aciago de los desgastes de un modelo político que está emitiendo sus últimos agónicos suspiros antes del inevitable y doloroso final.

Un presidente que no gobierna, y no gobierna porque no sabe, que no visita el interior, pero viaja al mundo a erigirse como líder todopoderoso de la ultraderecha internacional y el anarcocapitalismo. Para él el país es la CABA, no tiene partidarios directos de LLA que sean intendentes o gobernadores y que se maneja por medio de las redes sociales como un tiktoker adolescente, pero que se le ocurre hacer un mitin para lanzar LLA y poder competir en las elecciones legislativas del año que viene. Un presidente que no gobierna, pero está de campaña.

Era muy gracioso ver cómo los periodistas entrevistaban personas que estaban bajando de los colectivos contratados diciendo: “no sabía que era un acto de Milei”, “aquí estoy esperando instrucciones”, “a mí me invitaron y me pagan para que venga”, y mejor no seguir porque había gente que había ido solo “para escuchar las boludeces que va a decir”, como dijo un joven que después agregó: “yo vivo a dos cuadras de aquí y vine a cagarme de risa un rato”.

El Jefe, “o sea, digamos,” la Secretaria general de Presidencia y hermana del Javo, estaba muy nerviosa, le picaba mucho la nariz, se ve que era de la “buena” porque se tocaba mucho, me refiero a las gotas de la nariz que usó, seguro porque sufre de alergia y estaba en un parque muy polinizado, pero lo más sorprendente fue lo afectada que tenía la voz, como si tuviera problemas tiroideos esta chica, por las variaciones de su voz, se parecía bastante al Gallo Claudio, (Tira la bola chico, tira la bola…).

Su discurso me pareció poco consistente y como que no estaba muy convencida de lo que decía porque lo tuvo que leer, me parece que no está acostumbrada a la oratoria frente a un grupo de personas, la cuestión es que habló… solo eso. No quisiera pensar que instantes antes tuvo que reemplazar a la Princesa Victoria, que los plantó con aviso y a último momento.

Pero después vino lo mejor, entre una nube de monos de seguridad como debe ser, apareció Javo, cual exitoso Rockstar con la voz de un león, más parecida a la del cantante de La Renga que la que usa cuando dice: “el déficit cero no se negocia”.

Qué pocos argumentos expuso para pedir a sus fans que se afilien a su partido, en realidad a falta de realizaciones y políticas públicas que promocionar, bien valen las críticas al enemigo, porque Javo I, adversarios políticos no tiene, pensás como él o sos su enemigo. Fue muy gracioso y a la vez, como siempre, nos dio un poquito de vergüenza ajena, tanto ellos como sus seguidores, que dan menos que pena, los que eran “estéticamente superiores”, con El Gordo Dan a la cabeza de los trogloditas mantenidos por los padres, que ni estudian ni trabajan, los virgos que votan a su “influenzer”: Milei.

Estamos bajo un régimen autoritario, antidemocrático con una clase política que hace muchos años somete a la Argentina a un vaivén maniqueísta que no ofrece ningún tipo de continuidad política porque nunca están, ni se van a poner de acuerdo para sacar al país adelante, simplemente, quieren llegar al poder por el poder mismo y hacen de la política una carrera de la que se aferran para poder vivir de ella toda su vida.

Las idas y vueltas del Estado de Bienestar y el neoliberalismo, ultraderecha o anarco no sé qué, no es otra cosa que la manipulación que estos delincuentes y los medios de comunicación hicieron de la ignorancia y el analfabetismo político de los desclasados argentinos. Desclasados porque son clase trabajadora en su mayoría y creen que son clase media y votan a los ricos porque no conocen la diferencia entre clase media y clase alta, considerándose afortunados por tener un auto, vacaciones o casa propia, sin darse cuenta que ante el desempleo, su economía, como en el caso que vivimos hoy, los moviliza a la pobreza o la indigencia.

Es la misma gente que hoy le baja el precio a Milei porque entienden que fueron engañados y ya no le siguen, y el presidente muestra el triste espectáculo de su ocaso como se vio el sábado.

Emperador Javo, a veces las cosas no salen como esperamos, ni el Parque Lezama pudo llenar. ¿Viva la libertad…carajo?