El Superior – Las mujeres, los chicos y el perro se quedan en casa.
Históricamente conocemos las distintas formas de desvalorización y desprecio hacia la mujer; desde el trabajo que fue divididos en roles atribuidos a mujeres y roles otorgados a los hombres, dotándolos de virtudes y valores, las labores femeninas eran consideradas inferiores y negativas, excepto al momento de la maternidad por su función procreadora, donde el hombre se proclama como único dador de vida y la mujer depositaria de vida.
Curiosamente, en diálogos con Ana de 65 años, viuda hace nueve meses, me decía: “estoy tranquila, liberada” te cuento a vos, pero la verdad que no me animo así nomás a decirlo a otra gente, … “era mi marido”, un hombre que siempre estaba de mal humor, me costó quedar embarazada, pasaron varios años hasta que tuve a mi hijo, él me decía que yo no servía como mujer porque no era capaz de embarazarme y así en general, lo que hacía me las corregía, siempre estaba mal, todavía me fijo tres veces para asegurarme que esté todo bien, por ahí me parece que lo escucho corrigiendo, decía que era burra, inútil, si no fuera por él me moriría de hambre. Pero la verdad que desde que falleció hago como quiero y lo que me gusta, estoy aprendiendo telar y pintura, salgo a caminar con un grupo de mujeres, me siento tan libre que ni te imaginas, es como un sueño.
Esos “machos”, su masculinidad y superioridad, “el hombre de verdad” que debe sobresalir por entre los de su especie y género, demostrando su capacidad fáctica y su potencialidad sexual, ejercida en sus relaciones y conquistas, mientras más mujeres, mejor, donde su capacidad y potencia debían ser reconocidas y mostradas a otros, vanagloriándose con historias reales e inventadas, dejando demostrado su poder sobre las mujeres. “El término poder proviene del latín possum -potes- potui -posse, que de manera general significa ser capaz, tener fuerza para algo, o lo que es lo mismo, ser potente para lograr el dominio o posesión de un objeto físico o concreto, o para el desarrollo de tipo moral, política o científica”.(1) La lucha de las mujeres por hacer valer sus derechos viene desde hace varios siglos, hoy, gracias a esas luchas tienen más acceso a puestos de trabajo, a cargos políticos, etc., pero los porcentajes con respecto a los varones y su alcance todavía es insuficiente, quedando demostrado sin lugar a dudas que en un sistema dominado por el patriarcado nos quedan luchas pendientes, entre ellas deconstrucción de masculinidades, machismo y misoginia.
“Lamentablemente todavía existen muchas mujeres y niñas que sufren discriminación y hasta violencia basada en la tradición, la cultura y la religión, incluso la superstición. Aberrantes prácticas como la mutilación genital femenina, violaciones correctivas, la pena de lapidación pública, el matrimonio infantil, son solo algunas de las llamadas prácticas nocivas que no solo son practicadas y toleradas por la sociedad a la que pertenecen sino por todos en general cuando se conoce y no se hace nada en concreto por evitarlo. Por otro lado, y sin irnos tan lejos, cada vez son más los casos de mujeres que mueren a causa de la violencia de género”.(2) El desafío principal a partir de la participación de las mujeres a nivel social y política, promoviendo el enfoque de género, como urgente y necesario en las políticas públicas, especialmente, en el plano cultural y educativo, con garantías de articulación entre los poderes del Estado y actores sociales comprometidos en estas luchas de igualdad de género.
El objetivo como tal sólo es posible con la unidad y la lucha por nuestros derechos, construyéndose mediante el entendimiento democrático e igualitario, como principio básico de equidad, que ha de inspirar y fundamentar las estrategias y acciones de los actores políticos y sociales para sanar aquellas heridas que aun hoy se encuentran abiertas en la mayoría de las mujeres que nos encontramos en la búsqueda de la tan anhelada igualdad de género.
(1) Foucault, Michel: (l,999c). Estrategias de poder.
(2) https://www.ucc.edu.ar/noticiasucc/mujeres-por-mas-igualdad-y-mas-derechos/
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